TARJETA VISA CON SEGURO MÉDICO INTERNACIONAL: ¿QUÉ COBERTURA TIENE?

¿Tu tarjeta VISA tiene seguro médico internacional? ¿No lo sabes? ¿Crees que lo tiene, pero desconoces su cobertura, o sus condiciones? Lo cierto es que vivimos en un mundo globalizado en el que los viajes son algo fácil y cotidiano; pero es importante que además de hacer las maletas, antes de partir pensemos en tener la suficiente cobertura médica en caso de accidente o enfermedad. Nunca está de más ser precavidos y estar preparados.

Muchas personas creen que su tarjeta de crédito tiene un seguro, pero desconocen sus coberturas, o piensan que el simple hecho de llevarla consigo les permitirá beneficiarse del mismo. Lo cierto es que no todas las tarjetas tienen un seguro, y en el caso de las VISA su cobertura varía mucho según la tarjeta e incluso el banco. ¿Te interesa este tema? Pues presta atención a lo que te explicamos a continuación.

¿Tiene mi tarjeta seguro?

Lo cierto es que existen cientos de tarjetas VISA diferentes, a cada cual más distinta, y por tanto varían de igual forma sus condiciones y los seguros que llevan asociados. Lo ideal es que para evitar sorpresas, consultes con la entidad emisora de la tarjeta las coberturas que tiene asociadas y bajo qué requisitos, porque puede incluso que necesitemos contratar alguna cobertura extra.

Lo primero es que a nivel general, no todas las tarjetas, y tampoco todas las VISA, incluyen un seguro de viaje. Lo que sí suelen incluir es un seguro de accidentes en medio de transporte público, así como una indemnización por fallecimiento o invalidez absoluta, que varía mucho y puede ir desde los 50.000 euros hasta superar el millón, según la tarjeta.

Este seguro está limitado al propio viaje en el medio de transporte (avión, autobús, etc), y para que sea efectivo, deberemos haber abonado los billetes en cuestión con la tarjeta VISA, ya que en caso contrario no tendrá ninguna validez ni podremos reclamar nada. Además un accidente podemos tenerlo en cualquier otro momento, también dando un paseo o estando en la playa, y en ese caso no estaríamos cubiertos ni tendríamos derecho a asistencia médica.

¿Me basta con el seguro de mi tarjeta para viajar?

Otro error muy común es pensar “ya tengo el seguro de mi VISA, no necesito seguro de viaje”, sobre todo si pensamos en una estancia larga en otro país, o si pensamos en viajar a ciertos lugares donde contar con un seguro que cubra nuestros gastos médicos es obligatorio.

Lo cierto es que la diferencia en coberturas y condiciones entre el seguro médico internacional que pueda ofrecernos nuestra tarjeta VISA, y las de un seguro de viaje al uso, puede ser enorme. Así que si necesitas un buen seguro de viaje que se encargue de cubrir buena parte de tus gastos médicos en caso de enfermedad o de hospitalización, tienes que saber que la mayoría de las VISA no lo incluyen.

Una excepción según qué casos pueden ser los seguros de viaje que ofrecen tarjetas VISA como las tipo Oro o Platinum, que pueden ser muy completos e incluir elevados gastos médicos y una amplia asistencia médica que cubra incluso gastos de repatriación de enfermos y fallecidos, entre otros.

En cualquier caso, repetimos la necesidad de consultar las condiciones y coberturas con la entidad, porque éstas pueden no ser suficientes para lo que necesitamos. Además aunque seguros médicos como los de la VISA Oro pueden tener características similares a las de una póliza al uso, su validez suele estar ligada a que el pago de todo el viaje (incluyendo vuelo, hotel, etc) haya sido hecho íntegramente con la tarjeta de crédito en cuestión.

Limitaciones del seguro de la tarjeta VISA

Como ya hemos dicho, para que el seguro de cobertura médica de tu VISA durante el viaje se haga efectivo, el viaje deberá pagarse con la tarjeta de crédito; de lo contrario, no podrás reclamar nada. Y si además has pagado con la tarjeta el viaje para otras personas, normalmente el seguro incluido con la tarjeta sólo es válido para el cónyuge y los hijos.

Dependiendo de si se trata de una VISA Classic, Premium, Oro, Platinum, etc, las garantías, coberturas y franquicias varían mucho, así como las indemnizaciones, y lo normal es que cubran muy poco o nada en absoluto los gastos farmacéuticos. Por todo lado, hay que tener en cuenta también que su período de vigor no va más allá de los 90 días (lo que dura un visado de turista).

Por último, hay que recordar que el seguro de tu tarjeta VISA sirve para que los gastos médicos asociados a una enfermedad, accidente o cualquier otra circunstancia similar durante un viaje, te sean devueltos: pero tú deberás abonarlos en primera instancia.

Es decir, si debes acudir a un hospital en el extranjero o pedir una ambulancia, tú deberás abonar primero los costes correspondientes, y luego reclamarlos al seguro asociado a tu tarjeta para que te reembolse ese dinero. Todo ello conlleva una serie de trámites, y por supuesto un plazo de tiempo de espera.

¿Qué cobertura mínima necesito?

Ya hemos dicho que la cobertura médica que pueda ofrecer una tarjeta VISA para viajar al extranjero no puede equipararse a la de un seguro médico como tal, aunque según qué casos puede resultar suficiente. Hay que tener en cuenta que en países como Estados Unidos una operación puede rondar los 40.000 euros, por lo que si el seguro de tu VISA cubre como mucho 10.000, el resto deberás abonarlo tú.

Lo ideal a la hora de viajar es que la cobertura médica sea bastante elevada, de al menos 100.000 euros, con coberturas ilimitadas en caso de repatriación por accidente, enfermedad o fallecimiento; además conviene que incluyan los gastos de regreso anticipado por causa familiar grave, o de desplazamiento de un familiar en caso de que debas ser hospitalizado.

En todo caso, siempre antes de partir de viaje entérate bien de si tu tarjeta VISA cuenta con un seguro médico internacional y cuáles son sus coberturas, para no llevarte sorpresas desagradables y que así en tu viaje, ya sea por placer o por negocios, no tengas que preocuparte por nada más.

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